Septiembre y la vuelta al cole

Este año aún no sabemos cómo será la vuelta al colegio, cómo serán las nuevas rutinas pero si tenemos claro que el comienzo del colegio conlleva un cambio en la rutina de la vida de los niños, esta año tras tantos meses de parón y de situaciones diferente es el año de prestar más atención a esta vuelta a la rutina.
En septiembre comienza la vuelta a los horarios de clase, el tiempo de estudio y la realización de actividades.
Esta situación nueva que nos tocó vivir esta año es un buen momento para recordar la importancia de desarrollar los hábitos que favorecen la salud de los niños y ayudan a que puedan desempeñar sus tareas de forma adecuada.
1. Las mochilas
Empieza la cuenta atrás para que comience le cole y con ella empiezan los preparativos, las compras para el nuevo curso. La mochila tiene una gran importancia para la espalda de nuestros hijos, presta atención a estos consejos para comprar la mochila adecuada y utilizarla de la mejor manera para ellos:
1.1. Debe disponer de tirantes regulables de un ancho mínimo de 4 cm a la altura de los hombros
1.2. Deben disponer de sujeción a la cintura para evitar golpes por oscilación.
1.3. El respaldo debe ser acolchado y la mochila debe caer sobre la zona lumbar (por encima de las nalgas)
1.4. Debemos evitar que las mochilas tengan un peso superior al 10% del peso corporal del niño. Los bolsos de colgar al hombro y las mochilas con ruedas quedan desaconsejadas ya que provocan desequilibrio en la correcta postura
de la columna y hombros.
2. El descanso de los niños
Una parte muy importante del rendimiento escolar depende del descanso que tengan los niños, la falta de sueño provoca falta de atención en la escuela y bajo rendimiento escolar.
Es importante instaurar una rutina clara con respecto a la hora de acostarse y de levantarse. Los padres, y no el niño, deciden la hora de acostarse. Hay que tener en cuenta que los niños deben dormir una media de 10 horas.
3. Alimentación
El aporte de energía recomendada para cada edad debe ser repartida en 5 tomas al día, con un consumo diario de frutas y verduras, es recomendable siempre la
toma agua como bebida en las comidas, evitando el consumo de otras bebidas azucaradas. Debemos acostumbrar a los niños a realizar un buen desayuno ya desde la
infancia, el aporte calórico del desayuno nos ayudará a encarar las actividades de la mañana y además nos ayuda en el reparto de nutrientes (alimentos) durante el día.
Una comida equilibrada a medio día. La merienda es también una comida fundamental que no debe saltarse. Debe constar de alimentos saludables evitando en la medida de lo posible el recurso a la bollería industrial.
4. Actividad física y obesidad
El ejercicio físico es algo esencial en la vida de cualquier persona pero en los niños más aún porque les estas creando un hábito saludable que les acompañara durante su vida, ayuda a evitar la obesidad y el sedentarismo tan instalado en nuestra sociedad por la tv, los videojuegos. Ayuda a desarrollar una adecuada psicomotricidad y coordinación.
Es imprescindible la práctica de actividad física diaria, al menos 1 hora diaria, tal como se recoge en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
5. Calzado adecuado
Se debe utilizar un zapato cómodo, siendo el cuero el material más adecuado. El zapato deberá tener puntera redondeada y con un tacón de 0,6 a 0,9 cm de alto para los niños de entre 3 y 9 años, así como ser fácil de poner y quitar para fomentar su autonomía Debe quedar distancia entre la puntera del zapato y el dedo más largo. El crecimiento nos obliga a evaluar el ajuste del calzado con frecuencia, cada 3 o 4 meses para estas edades, porque en ese tiempo puede quedar pequeño para los pies del niño.
6. Cuidados quiroprácticos
Al igual que acudimos al pediatra a sus revisiones, les revisamos la vista y hacemos las revisiones dentales correspondientes debemos prestar atención a su Sistema Nervioso, el pilar del funcionamiento de su cuerpo debe estar libre de interferencias para que funcione con todo su potencial. Os damos 15 razones para que acudáis con vuestros hijos al quiropráctico.
Las 15 razones para traer a sus hijos a la quiropráctica:
1. El 65% del desarrollo del sistema nervioso (cerebro y nervios) se hace durante el primer año de vida.
2. Aumenta la buena salud y el bienestar.
3. Ayuda a reducir las deformaciones del cráneo (plagiocefalia) y cualquier trauma después del parto, sobre todo si se han utilizado fórceps, ventosas o cesárea durante el parto.
4. Ayuda a aumentar la inmunidad
5. Ayuda a los problemas de digestión como cólicos de lactantes, reflujos…
6. Ayuda al bebé o el niño a dormir mejor y ayuda a dar el pecho.
7. Ayuda a la concentración en el colegio y a los niños con hiperactividad.
8. Aumenta la buena postura y encontrar consejos ( cargar peso, mochilas, trabajos delante del ordenador…)
9. Previene y ayuda en problemas de espalda como por ejemplo, las desviaciones de columna (escoliosis), en problemas de cuello ( tortícolis por ejemplo) y en cojeras.
10. Quita las interferencias en la columna vertebral, debidas por ejemplo a las caídas (aprendizaje a andar, actividades físicas, saltos…) o accidentes de tráfico.
11. Evita que moje la cama.
12. Ayuda en manejar el estrés (de los exámenes…)